sábado, 15 de agosto de 2009

Quinto día…la vuelta a casa

Castillo de Francisco Javier



Y llegó el último día, el fin del viaje y de la aventura pirenaica.


Hicimos menos días de los previstos, no nos importó pues así lo decidimos entre los tres.

El viaje fue breve pero intenso y lo disfrutamos.


Yo cuando salí de mi casa no sabía qué nos depararía el viaje, no estaba demasiado ilusionada porque a veces temía que no nos arregláramos con los días, las noches o con las excursiones.


Al final todo salió muy bien e hicimos los días y los paseos a gusto de todos.


Salimos después del desayuno. Abrían a las diez las oficinas para pagar el camping, así que hicimos tiempo hablando y despidiéndonos del amigo de mi hijo y su familia.


Cuando nos dio la hora salimos pues ya teníamos todo dentro del noche preparado para la partida.


En la víspera habíamos comentado de ir a Urbasa, un lugar precioso y que deseo conocer. Pero el día estaba lluvioso y lo dejamos para otro momento.


Lo que sí hicimos es ir a ver el castillo de Francisco Javier, en Navarra.

De niña, cuando estaba en el colegio de Navarra fui a visitarlo con las monjas, pero era pequeña y no recordaba cómo era.

Tenía mucha ilusión por volver a verlo y mis hijos también se animaron.




En el trayecto hacia el castillo recorríamos el largo del pantanto de Yesa, se notaba que había perdido mucha agua, se veían las marcas de hasta dónde llegaba antes. De cualquier forma seguía siendo un paisaje muy bonito y digno de ver.


Llegamos al castillo pasadas las 11 de la mañana y entramos.


Aquí tengo que decir que me llevé una desilusión.

El castillo estaba muy bonito, renovado,….pero para mí demasiado artificial.

Los suelos de madera, las escaleras de madera,… le faltaba el encanto del castillo antiguo.


A mí me gusta entrar en estos sitios y a través de sus paredes, escaleras y habitaciones sentir que me transporta a esa época, imaginarlo cómo fue en su teimpo.


Este castillo, sin embargo, es más como un monumento, un sitio preparado por y para el turismo, pero sin el encanto que tendría un castillo renovado de acuerdo a como era en esa época.

El sitio es muy bonito y los jardines también, pero demasiado moderno todo para mi gusto.


En Semana Santa una amiga me invitó a su casa en Murcia y un día fuimos a Cartagena.

Allí vi el Anfiteatro Romano y me gustó mucho la reconstrucción que hacían de él. Pusieron piedras nuevas, pero respetando lo viejo, había incluso sitios donde costaba distinguir lo nuevo de lo viejo, ya que intentaron que se pareciera lo máximo a esa época.


Me encantó ese anfiteatro, y otros edificios que habían allí, que estaban hechos de la misma manera.

Eso es lo que me hubiera gustado ver en el Castillo de Francisco Javier y que eché en falta.

Mi hijo me ha dicho que en Bizkaia el castillo de Brutón es más real, como si fuera en ese época y que es muy bonito. Así que un día de estos nos animamos y lo vemos.


Salimos de allí sobre las doce y media salimos y fuimos a comer un bocadillo en Yesa.

Comimos con tranquilidad, relajados, y después de allí nos dispusimos a terminar el recorrido y llegar a nuestro destino.


Llegamos sobre las cinco de la tarde. Subimos todos los trastos, que eran bastantes, y sin ascensor. Subir cuatro pisos cargados es bastante cansado.

Hicimos varios viajes y cuando ya estuvimos en casa a recoger las cosas y a relajarnos.


Y éste ha sido mi viaje por los pirineos en compañía de mis hijos. Una experiencia muy agradable, nos hemos reído mucho, hemos conocido nuevos lugares y lo hemos pasado muy bien.


Teníamos ganas de estar en casa y sobre todo de dormir en una cama cómoda y espaciosa.

La primera noche después de llegar a casa me costó bastante dormir y daba bastantes vueltas, pero en estos días ya he recuperado las horas de sueño que tenía atrasadas.


Ha merecido la pena no ir al pueblo este año. El próximo quizá tenga que ir, pero no cambio por nada estos días que hemos pasado juntos en los pirineos.


Las fotos las hizo mi hijo con su cámara. Yo sólo saqué unas pocas con el móvil y puse un par de ellas, que habían salido bien. Las demás son suyas.

No se me da bien la fotografía y preferí que las hiciera él con su cámara, que es mejor. Así las fotos saldrían con mayor calidad.


Hasta el próximo viaje...agur




uxue


4 comentarios:

margarita dijo...

Me alegro que disfrutárais del viaje, ya que eso es el objetivo de viajar.

Por las fotos y los comentarios ha sido muy bonito y sobretodo lo has disfrutado con tus hijos.Un abrazo

uxue dijo...

Muchas gracias a ti por tus palabras y por leerme.
Mereció la pena el viaje y lo pasamos muy bien.
Pronto haré otro viaje hacia tu pueblo, espero que podamos vernos.
Un abrazo, hasta pronto

Carmen dijo...

Me ha encantado tu relato, uxue. Ya he tenido la suerte de disfrutar de todas las fotos que has hecho en tu escapada a los Pirineos. Maravilloso viaje, seguro que no lo olvidarás.

Besos, amiga.

uxue dijo...

No lo olvidaré. Fue un viaje especial, como el que hice después a Huelva.
Gracias por estar siempre ahí Gloria
Un abrazo enorme amiga

El lugar que me rodea

El lugar que me rodea