martes, 11 de agosto de 2009

Primer día…Ochagavia y alrededores

Otchagavia



Ya estaba cansada de dar vueltas dentro de la tienda sin poder dormir, así que antes de las 7 de la mañana me levanté y me fui al coche a leer un rato mientras esperaba a que se despertaran los chicos.

Estos al salir yo y tener más espacio aprovecharon para colocarse mejor en la tienda y se durmieron durante más de una hora.


Cuando se levantaron desayunamos, nos lavamos y recogimos la tienda para irnos a otro lugar.

Íbamos a estar por la mañana en esa zona, pero a la noche ya queríamos ir a otro pueblo y la tienda había que sacarla antes de las 12 de mediodía, así que lo metimos todo en el coche y enfilamos hacia el pueblo.


Compramos pan y algo para la comida y nos dirigimos a la oficina de turismo que acababan de abrir.

Allí les preguntamos por los recorridos posibles y nos explicaron muy bien por donde ir y los caminos a seguir. Nos dieron un folleto como ayuda y nos dispusimos hacer este primer recorrido.


Era un tramo de más de dos horas y era cuesta arriba casi todo el camino. Íbamos entre árboles, y en cada especie nueva que veíamos ponían qué era.

Estuvimos bastante protegidos del sol mientras caminábamos entre el bosque.

Cuando salimos de allí a un claro nos sentamos un rato a comer unos frutos secos y algo de fruta y nos dimos crema para no quemarnos.


El paisaje era muy bonito. Era sobre todo de árboles donde se veían bastantes ovejas pastando y en un tramo del recorrido se oía cómo estaban talando árboles.



Estos circuitos están bien señalizados. Si son de gran recorrido (GR) los señalizaban pintando en una piedra una raya blanca y otro roja en paralelo. Si era de sendero loca (SL) la raya era verde y blanca también en paralelo.

Si las rayas estaban cortadas o cruzadas quería decir que era el camino equivocado.

Sobre todo señalizaba con las rayas en paralelo cuando había cruces o algún camino que podía llegar a crear confusión.

Al ser un circuito la vuelta la hicimos por otro lado y de paso visitábamos un sitio nuevo y muy bonito donde está el Santuario de la Virgen de Muskilda.


Este santuario está a 1025 metros de altura, está rodeado por una cerca de piedra y en el interior está el templo y la casa del ermitaño.


Desde allí se veían los montes de los pirineos, tenían un mapa donde ponía el nombre de cada uno y la altura. Así nos podíamos situar mejor.


Eran impresionantes estos montes aún en la lejanía. Mi hijo había oído hablar de ellos, sobre todo de “la mesa de los tres reyes” y deseaba verlo.

Al principio lo dimos por imposible, pero él seguía con el gusanillo dentro, así que me fui mentalizando para ese nuevo recorrido, que no sería nada fácil.



El mapa que había en Muskilda

En ese lugar había unas mesas y bancos para sentarse y comer, así que comimos allí.

Algo que no había y que sí echamos en falta era una fuente (por lo menos nosotros no la encontramos y anduvimos buscándola) , hacía calor y nos habría venido muy bien el tener a mano una fuente con agua fresca.


Después de comer nos dirigimos a un río que estaba cerca del lugar y que tenía una zona como una piscina. Había gente tomando el sol. Mis hijos se pusieron los bañadores y se bañaron. El agua no era tan fría como en otros ríos y el sitio era ideal para descansar y refrescarse. Yo aproveché para leer un rato.

Desde niña me ha gustado el agua y bañarme, pero en ese momento no me apetecía y opté por la lectura.


Refrescándose


Por la tarde nos dirigimos hacía “Isaba”, el último pueblo de Navarra y que hace frontera con Huesca. Éste sería nuestro sitio de partida para ir a los demás lugares.


Dimos una vuelta por el pueblo y nos dirigimos a la oficina de turismo para ver el próximo recorrido.

El señor de la oficina nos atendió estupendamente. Nos indicó los posibles montes a visitar y nos dio los folletos.


Cuando le dijimos que queríamos ver "la mesa de los tres reyes" nos dijo que era bastante duro, pero posible de hacer. Nos dio también una hoja específica con las indicaciones para subir a ese monte. No habíamos ido nunca y cualquier ayuda nos venía muy bien.

Lo que sí nos advirtió con seriedad es que lleváramos mucha agua, que el camino era muy largo y no había forma de conseguir agua en el camino.

También nos dijo que algo más arriba del camping al que íbamos había un sitio muy bonito para ver, en Belagua. Estaba cortado a partir de ahí pues estaban con obras.


Con esa advertencia y dándoles las gracias nos fuimos hacia Belagua a conocer otro sitio más antes de irnos al próximo camping a descansar.


Allí también había senderos y esta vez recorrimos uno muy especial, se llamaba el sendero de los sentidos. Era un circuito corto que tenía una particularidad, y es que todo el recorrido tenía una cuerda puesta entre árbol y árbol para la gente discapacitada, incluso para la gente que no veía.

No se me ocurrió cerrar en ese momento los ojos y seguir el camino para ver qué se sentía, y ahora que lo pienso me hubiera gustado. Sé que hice el recorrido sintiendo la cuerda en mi mano todo el rato. Fue una sensación agradable y extraña a la vez.


Ojalá hubiera más sitos en los que se preocupen de poner este tipo de medios para quienes no puedan valerse por sí mismo lo puedan recorrer.

En otro tramo de esta zona había otro recorrido que tenía un letrero con una silla de ruedas, quería decir que era adaptado para ellos, bastante liso y ancho para pasear con la silla sin dificultad.


Anduvimos un rato por este lugar y luego ya nos fuimos al camping de Isaba, porque al día siguiente nos esperaría un duro día y teníamos que descansar.

Aunque, como el día anterior, yo no descansaría más de tres horas interrumpidas por las molestias del suelo en mi delicado cuerpo.


Nos inscribimos en el segundo camping y después de lavarnos cenamos, pronto nos acostaríamos hasta el día siguiente.


Tenía ilusión por poder subir a "la mesa de los tres reyes", pero a la vez temor porque mi cuerpo no aguantara. Yo no soy joven como estos chicos, no he subido montañas, no sabía de lo que era capaz mi cuerpo, y temía forzarle demasiado. Le dije a mi hijo que haría cuanto pudiera, pero que si no podía que lo tomara con calma. El me dijo que anduviera tranquila.


Y con esa esperanza de nuestra nueva hazaña nos iríamos a la cama hasta el día siguiente y nuestra próxima aventura.




Paisaje visto desde Muskilda




Santuario de la Virgen de Muskilda

uxue

4 comentarios:

margarita dijo...

Las fotos son preciosas y por lo que leo, la vivencia tambien, aunque no pudieras descansar mucho, se ve que lo pasate muy bien.
Nos veremos cuando vengas a ver a mi hermana. Recibe un fuerte abrazo

uxue dijo...

Es un sitio precioso, y lo apreciarás mejor cuando leas el relato de "la mesa de los tres reyes". Ese sí que es un lugar digno de ver y disfrutarlo.
Ya queda poco para ver a tu hermana y a ti, tengo ganas de conoceros.
Un fuerte abrazo y hasta pronto.

Carlos dijo...

Precioso tú relato niña y me he quedado con las ganas de seguir leyéndote. Las fotos son hermosas y dan ganas de estar ahí.
Me alegra mucho ver que a pesar de las noches de poco dormir el viaje fue de tu agrado y disfrutaste de la compañía de tus hijos.
Un fuerte abrazo Uxue…agur

uxue dijo...

De haber estado aquí tendrías que haber subido con nosotros, nada de esperar en la tienda a que lleguemos,...
Un abrazo enorme y gracias por seguir ahí...agur

El lugar que me rodea

El lugar que me rodea